Un gâteau de rêve. Un pastel de ensueño.

Hace casi un año me compré la revista en la que aparece esta receta y esta tarta me enamoró desde que la vi la primera vez pero, no se muy bien porqué, no me veía preparándola porque pensé que iba a ser muy complicado, ha resultado que complicado no ha sido tanto pero ha sido bastante costosa de tiempo en preparar y sobre todo ha tocado un punto débil: decorar con pasta de almendra, lo conseguí al tercer intento y a duras penas pero ya está, llegó y marchó, con lo que nos cuestan de preparar  y qué rápido vuelan, ¿eh?

 

TARTA FRESAS, NATA, MERENGUE

Así que he aprovechado una ocasión especial, he tenido más pero…, el cumple de mi madre para prepararla (se ha llevado también una buena ración de macarons de vainilla y fresa). Esta tarta es preciosa a primera vista, podría haber quedado más preciosa, hago lo que puedo, y cuando la cortas más preciosa, porque tiene un montón de capas y colores llamativos y cuando la pruebas, ¡ay! no puedo decir más, ¡¡muy rica!! Así que dejo de daros la lata ya y empiezo con toooodas las recetas, lo he hecho todo (o casi) al pie de la letra de la revista, así que es una traducción fiel del paso a paso y de la receta original.

¿veis los errores? ¡ay!

¿veis los errores? ¡ay!

Justo ahora que empiezo a mirar la receta para traducirla me doy cuenta que pone para 6 personas, madre míaaaa, ¡exageraooos! menudos trozos si es para 6, ¡jajajaj! De momento hemos comido 8 raciones (algunos glotones han repetido) y queda un poco menos de la mitad de la tarta…

Pastel de fresas, nata, merengue, mermelada….

Bizcocho:

4 huevos

120 gr de azúcar

120 gr de harina

60 gr de mantequilla fundida

1 pizca de sal

Preparación:

Batir los huevos con el azúcar y la pizca de sal al baño María hasta que la mezcla triplique el volumen. Cuando esté en este punto lo sacamos del calor y seguimos batiendo hasta que enfríe. A continuación, agregamos la harina poco a poco y suavemente la unimos al resto de ingredientes; por último, la matequilla fundida y enfriada y mezclar todo. Vertemos en un molde de 22 cm y al horno durante 30 minutos a 180ºC y solo abajo. Al sacarlo, desmoldamos y dejamos enfriar sobre rejilla.

Merengue de avellanas:

2 claras

100gr de azúcar

75gr de avellanas molidas (yo no encontré así que lo hice con almendras)

15gr de harina

1 pizca de sal

Preparación:

Montar las claras a punto de nieve, añadir el azúcar mientras continuamos batiendo. Incorporamos, con cuidadín, las avellanas o almendras molidas mezcladas con la harina.

Extendemos el merengue sobre papel de horno y en círculo con la misma medida que el bizcocho. Hornear durante 30 minutos a 100ºC.

Para el relleno, necesitaremos:

500gr de fresas

1 tarro de mermelada de fresa (si la queréis casera aquí encontraréis una receta riquísima!)

40gr de nata para montar

400gr de pasta de almendras

azúcar glace

Pasta de almendras:

La pasta de almendras, como ya sabéis, es una especie de mazapán muy suave. Yo, sin duda, lo prefiero para la decoración de las tartas antes que el fondant, porque aparte de ser muy manejable, aunque delicada, se puede también teñir y aporta un sabor delicioso y una textura al comerlo que no da el fondant… es mi humilde opinión)

150gr de almendras molidas

150gr de azúcar glace

1 clara

colorante (opcional)

Meter la almendra molida en un recipiente y tamizar el azúcar glace sobre ella. A parte, batimos con tenedor el huevo, para poder agregarlo más comodamente por partes a la mezcla. Empezar a mezclar la almendra con el azúcar; agregar poco a poco la clara, dejando el tiempo necesario para que vaya incorporándose la masa. Cuando este totalmente incorporado y empiece a formarse una bola, dejamos de batir. ¡Batir a velocidad muy baja y poco tiempo! Lo acabamos de formar en bola con las manos y lo envolvemos con film transparente para conservar en la nevera. Podemos hacerlo un par de días antes para poder trabajarlo mejor a la hora de decorar.

TARTA FRESA, NATA, MERENGUE

A parte, y cuando tenemos las partes horneadas ya frías, montamos la nata sin azúcar; lavamos las fresas y las cortamos en láminas finas o trocitos pequeños.

Preparación de la tarta:

Cortar el bizcocho en cuatro discos, uno de ellos un poco más grueso que el resto. Ponemos este disco en la base de la tarta y lo cubrimos con mermelada de fresas, sobre la mermelada ponemos el disco de merengue que volveremos a cubrir con otra capa de mermelada. A continuación, colocamos otro disco de bizcocho y lo cubrimos con mermelada, disponemos una capa de las fresas que hemos preparado antes y sobre ésta una capa de nata montada (sin azúcar, ¿eh? que ya vamos bien servidos). Repetimos la operación: bizcocho-mermelada-fresas-nata. Cubrimos esta última con la última capa de bizcocho y repartimos el resto de la nata sobre toda la superficie de la tarta, la pasta de almendras quedará bien pegada a nuestra querida tarta. Ponemos el bizcocho a enfríar un rato en el frigo.

TARTA FRESAS, NATA, MERENGUE

Para acabar la tarta, preparamos la pasta de almendras, la colocamos entre dos papeles de horno (es más fácil extenderla así. También recomiendan con azúcar glace en la base y rodillo pero yo no lo veo… ) y la extendemos con el rodillo bien fina, dejamos un grosor de menos de 5mm. Y cuando la tengamos así, tapamos con ella la tarta y la marcamos bien. Recortamos el sobrante (y nos lo comemos, que está muy rico). Lo conseguí a la tercera, las cosas delicadas no son lo mío, jeje… en parte creo que la pasta de almendras estaba un poco húmeda y creo que si os pasa lo mejor será añadir un poco de azúcar glace tamizado y volver a amasarlo un poco a mano para que absorba esa humedad.

Para la decoración, a vuestra elección, yo utilice rosas secas y una lazada (que ayudó a tapar algún que otro fallo, jeje). Debo decir que las rosas le daban un aroma al conjunto que … mmmm!

Todo casero, ¡hasta la base de la tarta!

Todo casero, ¡hasta la base de la tarta!

Por fin, aquí acaba la receta, espero, de verdad, que alguien os animéis a hacerla, para mi es una tarta muy especial, de las de amor a primera vista y primer bocado. El año que viene, la repito. Por cierto, con una copa de champagne bien frío… ¡sublime!

¡¡un besazo enorme y gracias por seguir ahí!!